EL AMOR DE PAREJA
Decía homero en "
La Ilíada" cuando habla sobre el amor que es "la magia
que vuelve loco al hombre cuerdo", y es que el amor, en algunas
de sus fases, nos hace hacer cosas que nuestra razón nunca
entendería.
No en vano es el estar enamorados cuando
se está más feliz, y más infeliz. Esos extremos emocionales nos
desequilibran, pero ese desequilibrio nos recuerda que estamos
vivos.
Al vivir el amor, nos cuesta dar, nos
cuesta aprender a recibir, nos cuesta dejar y aceptar cuando nos
dejan. En definitiva, no vivimos bien el amor, ni cuando esta, ni
tampoco cuando se va. Gran parte de los problemas de amor tienen la
misma raíz: el miedo. Nos da miedo amar. Nos da miedo no amar. Nos
da miedo morir de amor. Al final resulta que por miedo al miedo no
amamos. Y no amamos bien, amamos mal. Amamos con dependencias que nos
restan libertad y a veces, por amar mal, dejamos de ser nosotros,
mostrando solo aquella parte que el otro quiere ver.
La base de esas dependencias emocionales
que generamos con otras personas tienen una causa que generalmente
coincide con la falta de amor hacia uno mismo. Esto es, nos falta
autoestima.
Buscamos fuera lo que no encontramos
dentro. Exigimos en nuestro entorno inmediato el amor que nosotros
mismos no nos sabemos dar. Pero amarse a uno mismo no es la mejor
forma de amar mejor a los demás, es la única. No ama bien quien no
se quiere a si mismo, pues con el amor que da y el amor que recibe
busca ocultar vacios y satisfacer carencias, este amor no es sano.
Algunas reflexiones
(consideraciones)...
-
Haz algo que te haga sentir bien. Demuéstrate amor, permítete un gusto, algo que te apetezca. Cuanto más abarques el quererte a ti mismo, mas capacidad tendrás de querer a los demás
-
Obsérvate. ¿cómo amas? ¿Cómo te aman a ti? Y ¿cómo te amas tu? Tu forma de amar a los demás tiende a ser un reflejo de cómo te amas a ti mismo. Cuando amas demasiado, quizá te estás olvidando de amarte a ti. Busca el equilibrio.
-
Amar de verdad, es de valientes. Muéstrate sin miedos, siente, comparte y expresa. Todo el amor que no expreses, no existe.
-
Encuentra dentro lo que buscas fuera. No se trata de buscar que te amen, sino de amarte, para poder amar mejor.
-
Haz algo en cuanto puedas que demuestre tu amor a otras personas: algo que les guste, que les haga feliz, que sientan que has pensado en ellos. Cuidar es amar.
Dice Mercé Conangla, en su libro Corazón
que siente, ojos que ven "Por el amor somos capaces de hacer lo
que sea necesario: dejar ser al otro, dejarlo ir, no retenerlo, con
lágrimas en los ojos si es necesario, pero con afecto sincero. El
tiempo pasa y el amor permanece, los sentimientos se difuminan y el
amor permanece, la muerte deshace los compromisos y el amor
permanece. ¿Cómo podría un si sin condiciones convertirse en un no
cuando las condiciones cambian, cuando el otro toma un rumbo
diferente, enferma o muere? Aquella parte fundamental de la relación
mutua que era el amor sobrevive incluso al fin de la relación. El
amor es una fuerza todopoderosa que vaga en el aire casi con
divinidad."
El cariño:
Una de las principales causas de la
pérdida de entusiasmo es la sensación de que no nos quieren; y a
la inversa, el sentirse amado fomenta el entusiasmo más que ninguna
otras cosas. Un hombre puede tener la sensación de que no le quieren
por muy diversas razones.
Pero la confianza general en uno mismo
es consecuencia, sobre todo, de estar acostumbrado a recibir todo el
afecto que uno necesita. Y de este habito mental, considerado como
una fuente de entusiasmo, es de lo que quiero hablar en el presente
capitulo.
Lo
que causa esta sensación de seguridad es el afecto recibido, no el
afecto dado, aunque en la mayor parte de los casos suele ser un
cariño reciproco.
Muchas personas cuando se enamoran, lo
que buscan es un pequeño refugio contra el mundo, donde puedan estar
seguras de ser admiradas aunque no sean admirables, y elogiadas
aunque no sean dignas de elogios. Para muchos hombres, el hogar es un
refugio contra la verdad: lo que buscan con la que puedan descansar
de sus miedos y aprensiones.
Un ego demasiado fuerte es una prisión
de la que el hombre debe escapar si quiere disfrutar plenamente del
mundo. La capacidad de sentir autentico cariño es una de las señales
de que uno ha escapado de esta cárcel del ego. Recibir cariño no
basta; el cariño que se recibe debe liberar el cariño que hay que
dar, y solo cuando ambos existen en igual medida se hacen realidad
sus mejores posibilidades.
Hazle una visita a tu corazón
El amor es la llave que abre el camino de la felicidad. ¿Cuántas
veces discutimos o tratamos de cambiar a los otros por actuar desde
la cabeza en vez de hacerlo desde el corazón? Intenta bajar a tu
corazón y conectarte con tus verdaderos sentimientos, aprenderás
mucho de ellos. ¿Te has parado a pensar que la clave de las
relaciones con los demás pueden estar en la comprensión y no en la
persuasión? Solo en el corazón se encuentra el motor de nuestras
decisiones, es un motor expansivo, cuya energía nos impulsara hasta
el infinito si se lo permitimos.
Muchas veces, las decepciones que
sufrimos en la vida hacen que el miedo, y no el amor, tome las
riendas de nuestra existencia: creamos barreras, para que los demás
o incluso para que nosotros mismos no seamos capaces de llegar a
nuestro corazón. Sin embargo, estas barreras, lejos de protegernos,
nos separan más y más de una vida en plenitud.
Buen consejo:
tratar de descubrir la razón de nuestro miedo es un primer paso
fundamental para nuestro desarrollo, ya que en el temor siempre hay
una lección importante que aprender. Una vez la hayamos aprendido,
no temeremos escuchar a nuestro corazón, que es nuestro gran
maestro, para vivir en consonancia con sus latidos y dejar la eterna
lucha que hemos emprendido con él.
“El amor cura a quien lo recibe y a
quien lo da.”
KARL A. MENNINGER
El ideal de respeto
El ideal de respeto consiste en entender
que tu no necesitas cuidar a la persona que tienes al lado, porque
esa persona es capaz de cuidarse por si misma. Consiste en entender
que tú no necesitas que la persona que tienes al lado te cuide,
porque tú ya eres capaz de cuidarte por ti misma o por ti mismo. El
ideal de respeto consiste en entender que cuando tu
cuidas a la persona que
tienes al lado, lo que estás haciendo es incapacitarla, lo que estás
haciendo es trasmitirle el mensaje de que ella no es capaz de salir
adelante por sí sola.
Recuerda: que puedes amar a la persona
que tienes a tu lado sin necesitarla, sin cuidarla. Puedes amar a la
persona que tienes a tu lado desde el respeto a su autonomía
personal y a tu autonomía personal.
El apego
Cuando
el amor hacia una persona lo vives como una necesidad, como la
perspectiva de una angustia imposible de soportar si la otra persona
no está, entonces posiblemente hayas franqueado la barrera del amor
para entrar en el terreno del apego.
El amor romántico
Al igual que el apego es un juego
psicológico más. El amor romántico engancha, es entretenido y
exalta las emociones. El amor romántico deja a las personas a merced
de sus propias emociones. Este exacerba tanto las emociones
agradables (alegría, la ilusión, la euforia, el regocijo) como las
emociones desagradables (la rabia, el dolor la desesperación).
El amor romántico anula tu yo, el amor
romántico coloca el control de tu vida en manos de la pasion a la
que te has entregado, o en manos de la persona que amas.
Qué
es el amor, según Sternberg
Uno de los científicos más reconocidos
en el campo del enamoramiento y el amor es Robert Sternberg, que con
su “Teoría triangular del amor” describe los distintos elementos
que componen este fenómeno, así como las posibles combinaciones de
estos elementos a la hora de formar los diferentes tipos de
relaciones.
Las tres cualidades clave en las
relaciones de pareja son: intimidad, pasión y compromiso.
-
Intimidad: La cercanía entre los individuos que componen una relación es lo que Sternberg nombra como intimidad. Dicho de en otras palabras, es la conexión emocional. el afecto y la confianza que hay entre entre éstos.
-
Pasión: Este autor denomina pasión a la energía y la excitación que existe en la pareja. Es el impulso y la necesidad de estar con el otro. Es la atracción física.
-
Compromiso: Es una decisión, el querer estar juntos a pesar de los malos momentos. Es tener una visión compartida del futuro.
Estas cualidades se combinan y dan lugar
a los diferentes tipos de relación. La expresión más intensa y
gratificante del amor es cuando estos tres aspectos aparecen juntos.
Sternberg afirma que existen 7 formas de amar, son las siguientes:
-
Cariño: El cariño es la amistad auténtica. Hay intimidad, pero no pasión ni compromiso.
-
Encaprichamiento: Es característico de relaciones superficiales. Existe pasión pero no hay ni intimidad ni compromiso.
-
Amor vacío: Es una relación interesada. Hay compromiso pero no pasión ni tampoco intimidad.
-
Amor romántico: La pasión y la intimidad hacen que la pareja sienta gran atracción, pero no hay compromiso.
-
Amor sociable: Hay intimidad y compromiso, pero no pasión. Aparece cuando la relación pierde la química.
-
Amor fatuo: No hay intimidad. Las personas sienten atracción y quieren estar juntas, pero no tienen muchas cosas en común.
-
Amor consumado: El amor consumado es el más intenso y combina los tres elementos: intimidad, pasión y compromiso.
DEL LIBRO: LA VIDA INTEGRAL:
La meditación del amor incondicional
Existe una forma de meditación de
meditación que amplifica las emociones positivas al tiempo que
aporta numerosos beneficios tanto emocionales como físicos.
Se basa en cuatro frases que uno ofrece
a personas de su elección, (por supuesto, puede adaptar estas frases
como consideres conveniente e incluso cambiar el orden si lo deseas):
-
Que seas feliz.
-
Que goces de buena salud.
-
Que vivas seguro y en paz.
-
Que estés bien.
De todos modos, se sugiere empezar
ofreciéndose las cuatro intenciones a uno mismo:
-
Que sea feliz.
-
Que goce de buena salud.
-
Que viva seguro y en paz.
- Que este bien.
Acto seguido se repite el ejercicio
dejando que nos venga a la mente una persona que nos sea muy querida
y le repetimos la frase (en voz alta o en silencio). Se prosigue con
una persona "neutra", es decir, un conocido, un vecino o un
compañero de trabajo, por ejemplo. Por último se evoca mentalmente
a una persona más difícil de amar y se le repiten también las
cuatro frases.
Las relaciones
Es importante procurar estar bien
rodeado a lo largo de toda la vida, a fin de colmarse de los
beneficios que reportan las relaciones de calidad.
No obstante, el refrán "Más vale
estar solo que mal acompañado" siempre prevalecerá. En efecto,
parece ser que mantener una relación enfermiza es peor que no tener
relación alguna. En ese sentido, si bien las investigaciones
demuestran la importancia y los efectos positivos del vínculo que
nos une al otro, no por ello es cuestión de mantener ese vinculo a
toda costa, cualquiera que sea la situación. Cada vez hay más
solteros felices, porque se sienten realizados, autónomos y libres.
Por el contrario, las personas aisladas
que no lo están por propia elección son menos dichosas y tienen
peor salud. La soledad seria fuente de depresión e iría igualmente
asociada a una morbilidad y una mortalidad incrementadas. Las
relaciones sociales consideradas negativas suponen una fuente de
estrés. Por eso, la pérdida de un ser querido (amigo, pareja)
afecta enormemente a nuestro nivel de felicidad.
Felicidad, salud y longevidad en
pareja
Por una parte, la vida en pareja
favorece la salud (cuidas del otro, te motivas, os ayudáis
mutuamente, comes mejor y muestras menos conductas de riesgo). Por
otra parte, los problemas que impiden vivir en pareja (heridas
psicológicas, complejos, un pasado no resuelto, etc.) pueden también
devenir en sí mismos una causa de sobremortalidad.
La noción de amor
Según Barbara Fredrickson, los
micromomentos de amor, (que pueden producirse en cualquier lugar y
cualquier instante, con cualquiera, incluso con desconocidos, y no
nos referimos al amor apasionado o romántico entre una pareja).
Tales micromomentos de amor crean una resonancia positiva entre dos
individuos. Para que semejante resonancia se manifieste, deben
producirse de manera simultánea tres acontecimientos:
-
La presencia de una o varias emociones positivas compartidas.
-
La sincronía entre el comportamiento y las relaciones fisologicas de dos personas.
-
La intención de contribuir al bienestar del otro, lo que conlleva una solicitud mutua.
Además para crear una resonancia
positiva, habrá que asegurarse asimismo de estar física y
emocionalmente presente y de apaciguar el ritmo... eso es lo que nos
permitirá saborear plenamente el amor.
El amor, o la falta de él, puede
modificar nuestra fisiología- ¡basta con pensar en las mejillas
sonrosadas de los enamorados-!, así como la regulación de diversas
sustancias bioquímicas del cuerpo. Esto, evidentemente, afectara a
nuestra salud fisca y nuestro bienestar, además de modificar sin la
menor duda la expresión del ADN en las células. Así pues, el amor
determinara nuestra esperanza de vida de forma tan poderosa como el
aire que respiramos y los aportes nutricionales que proporcionamos a
nuestro organismo.
El hecho de mantener relaciones cálidas
y afectuosas con los demás disminuirá los riesgos siguientes:
-
Resfriado.
-
Hipertensión.
-
Enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebro-vasculares.
-
Diabetes.
-
Enfermedad de Alzheimer.
-
Ciertos canceres.
Para terminar, Oscar Wilde decía que:
"solo el amor puede mantener a alguien con vida". Ahora
disponemos de diversas pruebas científicas que lo corroboran. ¡Otros
buenos motivos para cultivar las relaciones sociales y mantenerlas,
propagando amor a nuestro alrededor!
Ama...¡aprende a quererte a ti mismo,
a querer a los demás y a amar la vida! Propaga el amor a tu
alrededor, de mil y una maneras."
Frases
de Erich Fromm sobre el amor, "El arte de amar"
1. El amor es la preocupación activa
por la vida y el crecimiento de lo que amamos
El amor era y es, por tanto, ese motor
que debe empujarnos a ser mejores. Para ello, estamos
obligados a trabajar de forma activa en nuestra personalidad y
crecimiento personal, de manera que satisfagamos primero al amor
propio, para después
amar en plenitud al otro. Algo así requiere verdadera humildad,
coraje, fe y disciplina.
2.
El amor es una actividad, no un efecto pasivo; es un estar
continuado,
no un súbito
arranque
Esta es otra de las frases de Erich Fromm
más representativas y donde se nos insta a
dejar a un lado esa nube en la que estamos instalados para afianzar
esa relación, para invertir esfuerzos, para ir juntos de la mano
trabajando en un mismo proyecto
y siendo creadores cotidianos de nuestra propia relación.
3. El amor infantil sigue el
principio: “Amo porque
me aman”. El amor
maduro…
“El amor infantil sigue el principio:
“Amo porque me aman”.
El amor maduro obedece al principio: “Me
aman porque amo”. El amor
inmaduro dice: Te amo
porque lo necesito. El
amor maduro dice: “Te
necesito porque te amo”.
4. Si dos personas que han sido
extrañas…
“Si dos personas que han sido extrañas…
dejan de pronto que la pared que hay entre ellas se rompa para
sentirse y descubrirse, esta será una de las experiencias más
emocionantes de la vida”
5. El amor no es esencialmente una
relación con una persona específica
“El amor no es esencialmente una
relación con una persona específica; es una actitud, una
orientación del carácter que determina el tipo de relación de una
persona con el mundo como totalidad, no con un objeto amoroso”.
6.
Resulta paradójico que dos seres se hagan uno y a la vez sigan
siendo dos
No podemos olvidar que el auténtico
arte de amar consiste en seguir siendo nosotros, pero implicados en
un mismo proyecto. Ser dos en
un mismo compromiso, ser dos orientados a la responsabilidad de
facilitar el propio crecimiento y el de la pareja…
7.
Hay una gran diferencia entre enamorarse y permanecer enamorado
Por su parte,
quien sabe (y quiere) ir más allá de la atracción y excitación
sexual inicial, procurará crear una auténtica intimidad,
procurará ser un artesano para hacer del enamoramiento un amor real,
un amor maduro y valiente.
BIBLIOGRAFIA:
CONANGLA,
Mercé y SOLER, Jaume: Corazón
que siente, ojos que ven (2012).
ED. Planeta.
DE
SURANY,Carolina: Ikigai.
(2018). ED. Edaf
DUPONT,
Eric y MICHAUD, Christine y BILODEAU, Diane y FORTIN Christian: La
vida integral. (2018). ED.
Vergara
CONANGLA,
Mercé y SOLER, Jaume: Corazón
que siente, ojos que ven (2012).
ED. Planeta.
FROMM, Erich: El
arte de amar.