martes, 28 de junio de 2011

CARENCIAS SENSORIALES Y SENILIDAD






Joaquin Benito Vallejo







(Este artículo es una colaboración de Joaquín Benito Vallejo.)

En esta exposición vamos a centrarnos en mostrar que el deterioro psíquico, de la conciencia y de la personalidad, manifestado en los ancianos y justificado como una característica de la vejez, tampoco es la causa directa de la vejez, en una mayoría de casos.


El origen de la desestructuración del psiquismo, como intentaré demostrar, radica en las carencias sensoriales continuadas; la pérdida de movimiento, y sobre todo en la falta de relaciones y de comunicación con los demás.

La imagen corporal, - el conocimiento que tenemos de nosotros mismos -, no es un conocimiento estático ni un conocimiento teórico aprendido en una enciclopedia, ni concedido por la gracia divina. Es un conocimiento que emana de la propia experiencia corporal. Se construye mediante la vivencia y el quehacer corporal a través de las sensaciones, el movimiento, el aprendizaje, la comunicación. Todo cuanto el cuerpo hace, transmite informaciones sensoriales al cerebro las cuales originan la percepción y la consciencia.

Si no hubiera actividad corporal no habría informaciones sensoriales ni desarrollo cerebral. No habría imagen corporal ni personalidad. Por el contrario, cuantas más experiencias corporales proporcionemos, mayores serán los recursos mentales, mejor se irá perfilando la imagen corporal y se irá definiendo el Yo.

"Esto demuestra que la falta de estímulos sensoriales produce cambios anatómicos y fisiológicos en el cerebro y que los programas genéticos no son suficiente para el desarrollo cerebral y el mantenimiento de las funciones mentales, siendo imprescindibles los estímulos exteriores a través de la educación el aprendizaje y la cultura”. (Delgado ; El cerebro y yo. Ed. Temas de Hoy).

La estimulación táctil es una de estas actitudes sociales que cumple funciones fisiológicas y psico-afectivas. La única conducta que ejercen muchos mamíferos hacia sus crías recién nacidas, es la de lamerlas. Esta actitud cumple la misión de estimular las principales funciones corporales: gastrointestinal, genitourinaria, respiratoria, circulatoria, digestiva, reproductora, nerviosa, endocrina y tónica.

La estimulación directa de la piel se realiza a través de las caricias y de los abrazos; del contacto cuerpo a cuerpo, piel a piel, que es la base y la esencia de la afectividad: ser querido, protegido, aceptado, valorado, comprendido. Ser tocado es sentirse, sentir el Yo, sentir las cualidades del propio cuerpo, de la persona. Son sensaciones placenteras que demuestran y alimentan la existencia propia. Supone la conformación, la afirmación y la reafirmación del Yo. Pero además de sentirse a uno mismo a través del contacto, se siente al otro ; es un sentirse mutuo ; es la comunicación. A través del contacto con la piel, la estimulación fisiológica y afectiva se unen en una sola función.

El movimiento activa el funcionamiento de todos los órganos, es el mayor productor de sensaciones , por lo tanto es el mejor transformador del cerebro. El psiquismo se formó mediante lo que el cuerpo aprende y todo lo que se aprende ha tenido que ser hecho, experimentado, sentido, y compartido.


El movimiento estructura nuestro cuerpo y nuestra mente, nos proporciona seguridad, confianza y autoestima, además de configurar la estructuración mental lógico - matemática necesaria para la comprensión del mundo.

Tacto y movimiento, están muy estrechamente ligados y se complementan mutuamente. Hay que destacar la importancia vital de éstas estimulaciones no solo en la infancia, sino a lo largo de toda la vida. La vida es una constante formación, aprendizaje y transformación; un progresivo enriquecimiento y maduración personal durante la infancia, la juventud y la vejez. Es una estimulación corporal que trasciende lo físico y llega a lo más profundo del espíritu. El cuerpo encarna la espiritualidad.

El enriquecimiento de la personalidad se basa en una actitud abierta e inquieta de auténtica búsqueda y renovación permanente en cualquier ámbito de la vida: el trabajo, las relaciones, la amistad, la comunicación, el ocio, la cultura, la participación social. Para desarrollar todas las potencialidades humanas hay que cultivarlas. Sin embargo, cuantos menos recursos culturales y económicos se poseen, más se tiende a la rutina. No hay nada nuevo en la vida. No hay estímulos sensoriales nuevos que generen crecimientos neuronales. Con esta actitud comienza el lento declinar inerte y pasivo que pacientemente va adueñándose de la persona y cuando años más tarde comienza a manifestarse claramente como un deterioro psicofísico, se dice que es la vejez. La vejez y el envejecimiento existen. Son sinónimos de tener más años no necesariamente de degeneración y de ineptitud. Ésta es el resultado de una forma de vida carente de estímulos, rutinaria, aislada, pobre - física o psíquicamente -. El deterioro también puede ser agravado y acelerado por acontecimientos inesperados y fatídicos. Además de accidentes o enfermedades, el aislamiento producido por el abandono de los hijos o familiares más allegados, la muerte del cónyuge, la pérdida de amigos, el retiro laboral, etc., pueden llevar a un ostracismo donde desaparezcan las ganas y la motivación de moverse, con lo que se deteriora aceleradamente la función motriz y unida a ella, la autonomía, el contacto directo con otras personas y la comunicación.

Si el movimiento, la comunicación y la relación corporal con otras personas, son los cimientos de la estructura psíquica, de la formación del Yo, de la personalidad y de la conciencia, la ruptura de esos cimientos, acarreará el resquebrajamiento de la estructura psíquica y del sentimiento de ser uno mismo. La falta de informaciones sensoriales producirán grietas, huecos y vacíos en sus áreas cerebrales.

¿ Es posible detener este proceso de deterioro y desestructuración?, ¿ Es posible prevenirlo ?, ¿ Qué se puede hacer ?

Citemos a Rappoport: “En los adultos, las investigaciones sobre privación de estímulos han mostrado que cuando se disminuye marcadamente la estimulación sensorial, los procesos mentales se desorganizan...” “La estimulación es necesaria para que los sistemas nerviosos se desarrollen y se mantengan debidamente.” “Dado que la apatía y la declinación física asociadas con el marasmo infantil pueden atribuirse a la falta de estimulación ¿porqué no considerar que la misma causa guarda relación con la senilidad ?” “Es posible organizar enfoques prácticos relativos a la cuestión de la calidad de la actividad ... Analizar diversas actividades de acuerdo con su potencial de estipulación. Debiera considerarse el grado en que las actividades implican interacción social... ser capaces de discriminarlas según su potencial de estimulación y determinar después si sus beneficios psicológicos son o no diferentes.” “La estimulación ofrece la línea más prometedora para la investigación futura." (Rappoport ; La personalidad desde los 26 años hasta la ancianidad. Ed. Paidos).

Creemos que muchas demencias seniles son el resultado de una forma de vida rutinaria, carente de estímulos, agravada por una serie de acontecimientos que conducen al aislamiento y la incomunicación progresiva.

De modo similar a como ocurre con los niños de Spitz, confirmado por Bowlby y ratificado por los casos de otros niños que sufrieron aislamientos y carencias sensoriales, sobre todo contacto afectivo, además del gran número de experimentos llevados a cabo con animales consideramos que las carencias efectivas, la falta de contacto corporal, el aislamiento y la incomunicación son los desencadenantes de la pérdida de la imagen corporal, de la desconexión con la realidad y de la desestructuración de la personalidad, síntomas que se concretan y adjetivan como demencia.

Creemos también que muchos de estos estados de demencia, dependiendo de la gravedad a la que se haya llegado, pueden ser reversibles.

En primer lugar, como ya se ha apuntado, la prevención es el método más válido y es donde hay que volcar todos los esfuerzos. En otros casos hay que poner en marcha programas basados en el contacto corporal, mediante diferentes tipos de masaje sensitivo, que estimule las funciones fisiológicas de la piel, además de las funciones sensoriales y psicoafectivas; desarrollando también las relaciones y la comunicación con las personas del entorno; estimular y desarrollar el movimiento en dos direcciones básicas : como fundamento de la propia autonomía personal, como medio de estimulación sensorial, y como base de las relaciones con los demás.

La meta de estos planes es lograr el enriquecimiento de la imagen corporal, del YO, de la propia identidad y de la personalidad. En otros artículos daremos ejemplos prácticos de como desempeñar estos objetivos.

Lo podéis leer en su totalidad en:


"Cerraremos este ciclo, la próxima semana con un articulo sobre el beneficio de los abrazos y hablaremos sobre la Abrazoterapia"
Joaquin tiene su escuela en:

Alfa Institut

Movimiento - Expresión – Danza – Teatro
Un espacio para el arte, la salud, el desarrollo humano y la comunicación.

C/ Tomás Bretón Nº 46-2º / 28045 Madrid - Telf: 91 593 24 15 / 628.68.79.79
http://www.movimientoyexpresion.org/


martes, 21 de junio de 2011

COMO INFLUYE EL TACTO, EN LA MEJORA DE LA CALIDAD DE VIDA DE LOS MAYORES


En muchos de los talleres que realizo con los mayores, una de las dinámicas con las que trabajo de manera habitual consiste en crear un buen ambiente donde cada uno sea protagonista durante un periodo pequeño de tiempo, durante el cual pedirá a sus compañeros algo que desee y que en su vida cotidiana, le da vergüenza o no se atreve a pedir.


La gran mayoría piden dos cosas: La primera, que sus compañeros le den un fuerte abrazo. La segunda, que le digan cosas bonitas que le hagan sentirse bien.

Si reflexionamos sobre este hecho, esto nos confirma la opinión que siempre he tenido de que uno de los principales motivos que hacen que se acerquen a estos talleres, es la gran necesidad de ser escuchadas/os, de contar cosas, sentirse entendidas/os, que reconozcamos la labor que realizan y lo poco que se le valora en su entorno familiar.

Como dije en un articulo anterior, son personas resignadas en su casa, pero con ganas de conocer gente nueva, que las valore y que compartan con ellas las ganas de crear y jugar, que entiendan sus necesidades y que juntos investiguen ese mundo interior emocional, que tanto tiempo han tenido dormido.

Y eso es uno de los objetivos de mis cursos y talleres: tratar que comprendan que sus problemas tanto a nivel fisco como afectivo son los mismos que tienen sus compañeras/os y a la vez tomen las riendas y se expresen libremente.

Y poco a poco, con mucho esfuerzo por todas las partes, se va logrando. Ver cómo cambia sus caras cuando son abrazados, como se emocionan y como sus emociones se disparan, logrando que el grupo se sienta participativo y receptivo hacia la persona que en ese momento esta siendo abrazado. Tengo que decir que es algo conmovedor y esperanzador.

Este nuevo artículo, va a ser el comienzo de otros dos. En esta primera parte he puesto un poco de mi experiencia sobre el encuentro de los mayores con el tacto, “El tocar”. Una segunda parte donde comentare lo que he encontrado publicado sobre este tema, e intentare trasmitir como benéfica a todas las personas. La tercera parte, también será práctica y es sobre la fuerza Emotiva que tiene el abrazarse. Es importante que nuestros mayores comprendan que se siente cuando abrazamos a otra persona. Debemos aprender a distinguir como ese contacto puede ser: calmante, cariñoso, afectivo, consolador o nos produce seguridad.

A veces pienso, en la suerte que tienen los animales, en como los tocamos, en como damos muestras de cariño al hacerlo y me hace pensar que sean ellos los que reciban lo que nosotros, como seres humanos, tanto necesitamos.

A medida que vamos envejeciendo, van disminuyendo las oportunidades de contacto físico y más si uno de los dos miembros de la pareja fallece, entonces es cuando el contacto físico del que sobrevive desaparece casi por completo.

Y es en la vejez cuando necesitamos más contacto, pues es cuando nos encontramos más asustados, solitarios y deprimidos.

Quiero finalizar este articulo, con un poema que me causo un gran impacto. Un poema que encierra una gran ternura, nostalgia y provocó en mí un cierto escalofrió no dejándome impasible al leerlo.

Espero que su lectura nos haga reflexionar sobre la terrible soledad y necesidad de contacto y cariño a la que puede llegar una persona mayor.


 
 
Poema de Donna Swanson, “Minnie Remembers”

Dios,
Mis manos son viejas.
Nunca lo había dicho en alto,
Pero lo son.
Antes estaba orgullosa de ellas.
Eran suaves
Como el melocotón maduro.
Ahora tienen la suavidad
De las sabanas ajadas o las hojas marchitas.
¿Cuándo estas manos esbeltas y gráciles
se convirtieron en garras nudosas y mermadas?
¿Cuándo, Dios?
Yacen aquí en mi regazo,
Desnudos recordatorios de este cuerpo cansado
Que tanto ha trabajado.


¿Cuánto tiempo hace que alguien me toco?
¿Veinte años?
Soy viuda desde hace veinte años.
Respetada.
Me dedican sonrisas.
Pero nunca me tocan.
Nunca me abrazan con tal fuerza
Que me hagan olvidar la soledad.


Recuerdo como me abrazaba mi madre,
Dios.
Cuando me sentía herida en carne o espíritu
Me acercaba a su persona,
Me tocaba el cabello
O me acariciaba la espalda con sus manos cálidas.
¡Oh, Dios, estoy tan sola!


 Recuerdo el primer muchacho que me beso.
¡Era tan nuevo para ambos!
El sabor de unos labios jóvenes y palomitas,
La intuición de los misterios que vendrían.


Recuerdo a Hank y a los bebes.
¿Cómo podría recordarlos, si no juntos?
Entre torpes intentos de nuevos amantes
Llegaron los bebes.
Y a medida que crecían, también lo hizo nuestro amor.
Dios, a Hank no pareció importarle
Que mi cuerpo se volviese algo más grueso y ajado.
Todavía lo amaba. Y lo tocaba.
No nos importaba no ser ya hermosos.
Y los niños me abrazaban mucho.
¡OH, dios, estoy tan sola!


Dios, ¿Por qué no criamos a los niños
Para que fuesen bobos y afectuosos
Y no solo dignos y correctos?
Cumplen sus obligaciones;
Vienen en sus buenos coches,
Entran en mi habitación y me presentan sus respectos.
Charlan animados y recuerdan el pasado.
Pero no me tocan.
Me llaman “Mama” o “Madre”
O “Abuela”.


Nunca Minnie.
Mi madre me llamaba Minnie.
Lo mismo hacían mis amigos.
Y Hank también me llamaba Minnie.
Pero ya se han ido.
Y Minnie también.
Aquí solo queda la abuela.
¡Y Dios! ¡Esta sola!



martes, 14 de junio de 2011

TERAPIA DE LA RISA



Definición

Es una estrategia de curación, también se le llama Geloterapia. Mediante la risa se consigue generar estados de animo buenos que influyen en nuestro cuerpo y nuestra mente.

Esta técnica, nos ayuda a liberar tensiones del cuerpo y llegar a la carcajada. Cuando una persona se ríe todo su ser participa de los efectos beneficiosos de la risa.

Se dice que la risa es innata, y que se aprende a reír inteligentemente a los cuatro meses.



¿Por qué es buena la risa?

La risa es buena porque ayuda a mantener el bienestar fisco y mental:

• Desarrolla sustancias: la serotonina; parecida a la endorfina que provoca efectos calmantes y analgésicos; también la adrenalina; con la que estamos mas activos y receptivos logrando una mayor creatividad, aumentando la autoestima y la confianza.

• Ayuda a que estemos menos tristes y a eliminar pensamientos y emociones negativas. Ya que es imposible reír y a la vez estar triste o pensar negativamente.

• Alivia el insomnio, pues la risa produce una ligera fatiga, que nos produce un sueño calmado.

• Nos beneficia en la solución de problemas, debido a que después de reír se perciben mejores soluciones debido al estado alegre.

• Beneficia a las personas tímidas ya que facilita la comunicación entre las personas.

• Nos ayuda a expresar emociones, cuando estamos en contacto con los demás.

• Fortalece los lazos afectivos, con las personas con las que nos reímos, pues es sabido que estamos mejor en compañía de aquellas personas que son alegres, en lugar de la de las personas tristes.

• La risa descarga tensiones. Después de que nos damos unas carcajadas nos sentimos mas aliviados y vemos que ha desaparecido algunas de las tensiones que teníamos.


Clases de risa


Dicen que hay mas de 150 clases de risa, pero solo una es la buena, la sincera y abierta, la que sale del corazón, esta implica al cuerpo y el alma.

Nos dice un proverbio chino, “que para estar sano hay que reír al menos 30 veces al día”, se recomienda por lo menos tres veces al día.

Según un sondeo que se hizo en Francia, el 26% de los franceses ríen a carcajadas dos o tres veces al día. El 30% son mujeres y el 22% hombres. ¿Será ese el motivo por lo que viven más las mujeres?


Algunas clases de risa:


1. Irónica: también llamada sardónica, es una risa cínica y despreciativa.

2. Picara: cuando tras la risa escondemos algo sin mucha importancia.

3. Tímida: al tener que rellenar un espacio, donde no sabemos que hacer.

4. Sincera: la del reencuentro con un amigo.

5. Reprimida: ante un error ajeno, por ejemplo cuando alguien se cae en la calle.


¿Por qué es bueno participar en grupo?


En nuestras sociedades aparece la risa como un medio de unión del grupo, un medio de disminuir las tensiones, un medio de participar en la alegría colectiva para todos los que están presentes.

La risa siempre es la risa de un grupo. Esta es contagiosa. Cuando vemos a alguien retorcerse de risa nos sentimos atraídos a hacer lo mismo, aunque no tengamos la más mínima idea de los motivos que han desencadenado su risa. Porque reír es una necesidad fisiológica.

Entre las personas que ríen juntas se establece un vínculo de solidaridad. ”Cuanto mas se divierte uno, mas unido esta el grupo. A veces el grupo se crea de la nada a partir de la risa”.




Breve descripción de una sesión:


El objetivo principal de las sesiones es que las personas se rían abiertamente, que la risa sea franca, como cuando eran pequeños. Como dice Elías, que la risa salga de dentro con fuerza.

Se debe enseñar a buscar la risa de forma activa, que se provoque voluntariamente para que fluya de manera natural, ya que somos libres para reírnos cuando queramos o lo necesitemos.

Fases:


• Una primera fase de desbloqueo, donde se intenta relajar los músculos, es conveniente poner una música tranquila. Empezamos moviendo los pies, rodillas, caderas, brazos y finalizando con la cabeza.

• En un segundo momento, utilizaremos dinámicas de grupo, con ellas lograremos que al principio el alumno tenga una percepción de si mismo, para ello empezara con imitaciones, muecas, representación de situaciones, etc. Destacar que en este momento todavía no hay contacto entre los participantes.

• Una vez que se va perdiendo el miedo y las personas se van desinhibiendo se entrara en una fase de contacto, se utilizaran dinámicas para practicar en compañía.

• Finalizaremos con unas dinámicas de relajación, luego se compartirán las experiencias dejando a cada alumno que cuente lo que le ha parecido la sesión.





Algunas conclusiones

• La risa es la manifestación fisiológica de un estado de placer.

• La risa ayuda a la cohesión del grupo social y construye mejores relaciones humanas.

• La risa ayuda a vivir mas tiempo, y con mejor salud.

• La risa es la mejor terapéutica contra el estrés.

• La risa rara vez es síntoma de enfermedad, casi siempre es señal de salud física y psíquica, es manifestación del deseo de vivir.



Podéis complementar este artículo, con otro que escribí en el grupo de www.saludterapia.com, cuyo enlace es: 


http://www.saludterapia.com/terapias-y-tecnicas/169-terapias-psicologicas/834-risoterapia-definicion-articulo.html



Bibliografía:

ELIAS, José. (2005): Guía practica de Risoterapia. Ed. Orión Ediciones.

LOPEZ BENEDI, Juan Antonio. (2004): Reír, para vivir mejor. Barcelona: Ed. Obelisco.

YERKES, Leslie. (2003): Con humor se trabaja mejor. Ed. Gestión 2000.

WILLIAM F. Fry y WALEED A. Salameh. (2004): El humor y el bienestar en las intervenciones clínicas. Bilbao: Ed. Desclee de Brouwer.

HOLDEN, Robert. (1999): la risa, la mejor medicina. Ed. Oniro

CASTELLVI, Enric. (2007): El taller de la risa. Barcelona: Ed. Alba.

BEGOÑA GARCIA, Larrauri: Programa para mejorar el sentido del humor. Ed. Psicología Pirámide.

JAUREGUI NARVAEZ, Eduardo. (2007): El sentido del humor, manual de instrucciones. Ed. Integral.

RUBINSTEIN, Henri. (1989): Psicosomática de la risa. Ed. Fondo de Cultura Económica.